Automoción: pintura, llantas y cristales protegidos
Antes de aplicar, lava a fondo, descontamina con productos férricos y arcilla, y corrige pintura si hay swirls u hologramas. Desengrasa con alcohol isopropílico, trabaja por secciones y respeta tiempos de curado. Una base limpia y lisa asegura anclaje químico sólido y un acabado uniforme, profundo y brillante.
Automoción: pintura, llantas y cristales protegidos
El recubrimiento cerámico reduce adherencia de barro, insectos y sal, facilita el secado y aporta claridad a cristales tratados. En climas calurosos, filtra UV y limita oxidación; en fríos, combate sales y humedad. Menos frotar, menos microarañazos, más tiempo disfrutando de un coche que parece recién detallado.
Automoción: pintura, llantas y cristales protegidos
Miguel aplica cerámico en su compacto urbano y planifica lavarlo semanalmente. Conduciendo en ciudad lluviosa, descubrió que un soplado y espuma neutra bastan cada tres semanas. La suciedad no se agarra y el brillo no decae. Ahora usa toallas limpias y suaves, reduciendo marcas de secado y roces innecesarios.
